17.7.12

Acompáñame - Los Amantes de Lola




Cuando siento lo distantes
Que nos parecemos hoy, 
Me doy cuenta de lo ilusorio, del amor. 

Mil historias han pasado, 
Mil historias tal vez vendrán, 
Y en todas habrá alguien, al final. 

Y no eres la única, que lloró aquí, 
Todos hemos sentido algo igual, 
Por eso ahora aunque estés lejos 
Ven, acompáñame, 
A ese lugar más allá de la percepción, 
Donde nos espera la felicidad. 

Son días difíciles 
Para los soñadores hoy 
Y sin embargo no puedo dejar de soñar. 

Todos hemos sentido algo igual, 
Tal vez estoy hablando de más, 
Por eso ahora aunque estés lejos 
Ven, acompáñame, 
A ese lugar más allá, de la percepción, 
Ven, acompáñame, 
Ven, acompáñame, 
Ven, acompáñame, acompáñame, 
Acompáñame, acompáñame, 
Acompáñame, acompáñame. 

Acompáñame muy lejos, 
Muy lejos, ven, acompáñame, 
Acompáñame, acompáñame, 
Acompáñame, acompáñame, 
Respira.

16.7.12

Alberto Chimal y el Viajero del Tiempo

El pasado 4 de julio asistí a la presentación del libro "El Viajero del Tiempo" de Alberto Chimal. Por poco y no voy, pues justo ese día se llevaron a cabo los festivales culturales de primaria del CEL, eventos que ayudé a coordinar (audio, video, guión técnico, fotos...).

La presentación se llevó a cabo en la Librería Rosario Castellanos, del Fondo de Cultura Económica. Era la primera vez que asistía y claro, me enamoré del lugar. Llegamos muy temprano (iba con mis padres) y disfrutamos ellos de un café y yo de un raspado. 

Mi padre empezó a hablar sobre el libro que había elegido para llevarse a casa: "El País de las Maravillas", de George Gamow y de pronto señaló a mis espaldas, ahí estaba Alberto. 

Fui a saludarlo y platicamos brevemente. Tuve el gusto de que me presentara a José Luis Zárate y los escuché debrayar sobre el posible nombre de "El Viajero del Tiempo 2" -escritores, a fin de cuentas XD-

Con 15 minutos de retraso empezó la presentación. Participaron Arturo Vallejo y Karen Chacek. 

La verdad, me divertí. Se habló sobre el tiempo, H.G. Wells, la minificción y la aparente competencia por escribir con un menor número de palabras, la ahora llamada literatura de la imaginación, el proceso creativo de Alberto...y claro, él leyó algunas de las minificciones de "El Viajero del Tiempo". 

Entre mis favoritas están las siguientes:

* El Viajero del Tiempo te saluda, se va 10 años, decide verte otra vez, regresa segundos antes de la primera. Déjà vu, pensarás. O piensas.

* -¿Cuál es el sentido si no se matan? - dijo el gladiador al Viajero del Tiempo mientras veían el partido de futbol

* (a)
El Viajero del Tiempo me lleva con un amigo que murió en 2003. Éste, al verme, se preocupa: -Parece que hubieras envejecido de golpe - dice.

(b)
El Viajero del Tiempo viene con un amigo al que vi ayer y ahora parece 10 años mayor. Entiendo de inmediato. -¿Por qué vienes hoy? - pregunto, de todos modos. 

* Si usted tuvo hoy una decepción, el Viajero del Tiempo puede darle una lista de todas las que aún le faltan.
- A veces ayuda - dice.

* El Viajero del Tiempo regresó y persuadió al conde Vlad de atacar, primero que nadie, a Bram Stoker. Perdimos una gran novela pero también mil malas. 

* El Viajero del Tiempo no sabía qué difícil es enseñar a un cuervo a decir "Nunca más" o, de hecho, cualquier otra cosa. 

Aquí algunas fotos y videos :)







Y para terminar, ^_^ \m/ resulta que el Viajero del Tiempo también es metalero: un detallote de Alberto Chimal. (¡Gracias!)




14.7.12

Nunca olvides que te quiero. Delphine Bertholon



Madison es una niña de once años que, como todas las niñas, asiste a la escuela, se enamora, pelea con su madre y tiene mil sueños en la cabeza. 

Un día, tras pelear con su madre, se fue al colegio sin despedirse de ella. La madre sonrió, presintiendo que era la adolescencia que empezaba a atormentar a su pequeña. 
Pero un hecho desafortunado le dio un giro a la vida de Madison, y las de todos sus familiares y amigos, incluso a la de su amor platónico: Stanislas, su profesor de tenis. 

Aquel día, un coche negro se detuvo a su lado y el conductor le pidió ayuda para hallar a un veterinario, pues su gatita estaba enferma. Madison vio la oportunidad de visitar al padre de Stanislas, quien era veterinario, y así poder ver a su amor. Dudando un poco, subió al auto. Pronto supo que había sido una mala idea.

Fue así como comenzó la nueva vida de Madison. Recluida en una habitación de tres por tres metros, pensaba una y mil veces qué había pasado. El hombre que la había secuestrado no quería dinero ni bienes, la quería a ELLA. 

En una relación un poco extraña, el captor, un hombre treintón y solitario, intenta conseguir que Madison lo quiera, pero ella se niega. Empieza entonces un juego donde ella hace uso de su astucia para conseguir lo que quiere y necesita, como un cuaderno, por ejemplo. 

La escritura se vuelve su válvula de escape, pero no sólo para ella, sino también para su madre y para Stanislas, ambos devastados por la ausencia y el mal de amores. 

Es en esas hojas blancas donde Madison anota todos sus pensamientos y sensaciones, donde reflexiona sobre su encierro y sobre R., su captor. Su cuaderno se convierte en su amigo y confidente. A él le cuenta sobre los cambios en su mente y en su cuerpo, pues, como había presagiado su madre, la adolescencia había empezado. 

Esta novela sin duda nos habla sobre el poder que uno puede llegar a tener mediante las palabras. Madison consiguió mantenerse viva gracias a todos sus escritos, su madre conservó la cordura dirigiéndole innumerables cartas a su hija, y Stanislas logró superar una herida de amor. 

Me gustó. Es un libro que realmente disfruté, pues es fácil de leer. Sin embargo, como está escrito juntando los textos de Madison, de la madre y de Stanislas, a veces hay saltos en la historia. Particularmente Stanislas escribe sobre los sucesos en tiempo pasado, mientras que ambas mujeres lo hacen en tiempo presente. 

En ocasiones deseé saltarme capítulos enteros, pues lo más interesante de la historia es lo que le pasaba a Madison. Los lamentos de la madre por su hija perdida y de Stanislas por un amor no correspondido se tornan a veces aburridos y repetitivos. 

Mi personaje favorito: R. Era un tipo solitario, atormentado por un madre sobreprotectora y que sólo buscaba ser querido. Pensaba que podía enseñarle a Madison a quererlo, pero era imposible, puesto que ni siquiera él mismo se quería. 

Y como nota, el final no me gustó. Me pareció demasiado estúpido para todo lo que había pasado entre Madison y R. Me hubiera gustado ver un poco más de lágrimas, sufrimiento...algo que fuera más caótico. Al ser así la escena, me queda la pregunta ¿por qué no lo había hecho antes Madison? Sí, fue muy estúpido. 

¿Volvería a leerlo? 
Sólo los capítulos que escribió Madison. 

12.7.12

Laboratorio de Cuento con Alberto Chimal

Desde el 23 de junio estoy tomando este taller. Aquí iré publicando mis apuntes para no olvidarlos y tenerlos a la mano cuando los necesite. Quizás a más de uno le sirvan.


10.4.12

James and the Giant Peach. Roald Dahl




Tuve la maravillosa oportunidad de leer este clásico para niños en su versión original: en inglés.

Roald Dahl es fan-tás-ti-co. La versión en español, la cual leí siendo una niña, me fascinó, sin embargo, no se compara en nada a la versión original. Destaco el ingenio de Dahl para crear palabras y nombres, así como la inclusión de versos divertidos.

Para quienes no conocen la historia:

James and the Giant Peach//James y el Melocotón Gigante relata la historia de James Henry Trotter, un niño que vivía felizmente con sus padres, en una isla. Un día, su suerte cambió cuando un rinoceronte se comió a sus padres, dejándolo solo. Entonces, fue enviado a casa de sus tías Sponge y Spiker, dos mujeres horribles, quienes lo detestaban y le hacían la vida imposible.

Un día, James se encontró a un viejo mago, quien le dio una bolsa con unas piedrecitas verdes, aparentemente mágicas. En un descuido, James las tiró y se perdieron entre la tierra que rodeaba al árbol de durazno.

Poco después, en el árbol empezó a crecer un gran durazno y dentro de éste, insectos gigantes aguardaban la llegada de James. Cuando él los descubrió, el durazno cayó del árbol y James empezó un viaje inolvidable en compañía de sus amigos insectos.

Es un libro maravilloso, ampliamente recomendable para chicos y grandes. Si quieres practicar el idioma inglés, Roald Dahl es una opción magnífica.

Ópalo. Blanca Álvarez.




La protagonista de la historia, una joven llamada Claudia, es enviada a la casa de su abuela -Miao San alias Mimi- en Madrid. Esto como castigo por no haber aprobado un par de materias.

Desde el inicio conocemos que entre Mimi y la madre de Claudia hay una pelea, surgida por la historia de la madre de Mimi, bisabuela de Claudia.

Claudia llega de mala gana a Madrid, el calor es infernal y en el edificio donde vive Mimi no sirve el ascensor. Sin embargo, poco a poco esta experiencia que parecía iba a ser terrible, se convierte en el tiempo y espacio para que Claudia se descubra a sí misma a través de los relatos de su abuela.

Mimi relata con gracia e inteligencia relatos y leyendas de China, país que lleva tatuado en la memoria. Junto a éstos, va escribiendo la historia de su madre, Ópalo, una mujer tan bella como enigmática.

Ópalo es un libro que ahonda en las relaciones entre la familia, en esos secretos que preferimos mantener ocultos, para tratar de olvidarlos definitivamente. Nos habla del pasado y su influencia en nuestro presente y futuro, en cómo ese pasado puede salvarnos, o bien, aniquilarnos.
Habla también del amor y de la delgada línea entre la vida y la muerte; de como esa dama elegante nos permite alargar nuestra vida para terminar nuestra misión.

A mi parecer, aunque el principio de la historia es un tanto pesado, es un buen libro. La historia de Ópalo, esa mujer tan enigmática, merece ser leída.

2.4.12

19

Si pudieras revivir a una persona, ¿a quién elegirías?