21.2.14

Cocoon. Yossi Sassi.

Como mencionaba en otra ocasión, Yossi Sassi decidió dejar Orphaned Land y seguir su carrera como solista.

Hace unos días dio a conocer el primer sencillo de su nuevo álbum: "Cocoon", Desert Butterflies.



Suena bastante diferente a Melting Clocks y aún no termino de decidir si me agrada o no. Como canción aislada no me convence del todo, pero quizás dentro del álbum funcione bien. Me parece que la indecisión se debe a que temo que Yossi caiga en el mismo error de OL: aferrarse a un tema y explotarlo hasta que no dé más...y aún más.

El carisma y la actitud súper positiva de Yossi no son un misterio para nadie, pero temo que todo su material gire en torno a una propuesta que parezca lema del grupo de los optimistas. Sí, está bien hablar del "no te dejes caer", "confía en ti mismo", "tú puedes" y etcétera, pero si es recurrente es muy hartante.

Me encanta Yossi y la mezcla de instrumentos me fascina, pero sus letras comienzan a no gustarme tanto. Melting Clocks me agradó porque funciona como un todo y a la vez cada canción es buena por sí sola. Creo, si no mal recuerdo, que la única rola con un poco del estilo de Desert Butterflies es "Sahara Afternoon", y eso por la cita del final. Las demás son tan diferentes como lo son los diferentes momentos del día.

No quiero adelantarme a hacer un juicio injusto sobre el trabajo de Yossi, así que esperaré a tener el álbum completo para seguir haciendo comentarios. Total, faltan un par de meses nada más.

15.2.14

Cosas pendientes. De Gelman y Pacheco.

En las últimas semanas he dejado muchas cosas pendientes por escribir, principalmente debido a la carga de trabajo de la escuela...y del trabajo (ay, qué raro suena eso).

Para empezar, las muertes de Juan Gelman y José Emilio Pacheco.

Cierto es que de Gelman no he leído mucho, pero en trabajos pasados sobre las dictaduras latinoamericanas y su influencia en la literatura, me enteré un poco de su vida y su obra. El tema me apasiona, lo mismo me hace sentir coraje que una gran emoción por ver cómo funciona la literatura en situaciones de enorme tensión y represión.

Pero la muerte de José Emilio...Ay.

Yo fui una más de los muchos estudiantes que leyeron El principio del placer y Las batallas en el desierto en plena secundaria. Ambos libros estuvieron conmigo en etapas importantes, pues Las batallas regresó años después, en un momento en que los libros fueron mi único soporte ante una vorágine de sentimientos y cambios de mi pequeño mundo.

José Emilio superó la barrera de la escritura y se convirtió él mismo en un personaje. Era querido, era respetado, era emblemático. Su muerte tocó las fibras sensibles de un país que lee poco, pero que recuerda con cariño a los autores que se han sabido ganar un lugar entre la gente. Es un fenómeno curioso cómo el escritor se vuelve autoridad y al irse, queda un vacío extraño, como si quedáramos desprotegidos.

Ahora sólo queda disfrutar lo que nos dejó: su obra. A leer, pero también a escuchar.